Un muerto, múltiples daños materiales y una comunidad aterrorizada dejó una pelea entre hinchas del Junior y Cúcuta Deportivo en pleno centro de Tolú. El partido entre Jaguares y Cúcuta fue suspendido.
Un grave episodio de violencia protagonizado por presuntos integrantes de barras bravas del Junior de Barranquilla y el Cúcuta Deportivo sacudió la tranquilidad del municipio costero de Tolú la noche del sábado 12 de abril. La batalla campal, que incluyó enfrentamientos con objetos contundentes, daños a negocios locales y motocicletas, dejó como saldo una persona muerta y una población conmocionada.
A raíz de los disturbios, se tomó la decisión de suspender el partido entre Jaguares de Córdoba y Cúcuta Deportivo, que estaba programado para disputarse este domingo en Sincelejo. La medida fue adoptada como precaución ante el riesgo de nuevos enfrentamientos y por solicitud de las autoridades municipales y departamentales.
La gobernadora de Sucre, Lucy García Montes, rechazó enérgicamente los hechos y lideró un Consejo de Seguridad extraordinario en Tolú, donde hizo un llamado urgente a la Dimayor, al Ministerio del Deporte y a la Federación Colombiana de Fútbol para revisar y reforzar los protocolos de seguridad en los estadios y en los desplazamientos de hinchadas por el país.
“El deporte debe ser un espacio de encuentro, no de violencia. Lo ocurrido en Tolú es inaceptable y nos obliga a actuar de manera coordinada y contundente. Solicitamos a la Dimayor y al Gobierno Nacional fortalecer las medidas preventivas para garantizar la seguridad en eventos deportivos”, expresó la mandataria.
Entre las propuestas discutidas está la evaluación de riesgo previa a cada partido, el control riguroso a grupos de barras con antecedentes de violencia y la coordinación interinstitucional para prevenir enfrentamientos en las vías, especialmente cuando hay desplazamientos entre ciudades.
Además, la Gobernadora solicitó a la Fuerza Pública intensificar los operativos en la zona y dar con la captura de los responsables de los desmanes. “Estamos con las autoridades locales avanzando en las investigaciones. No vamos a permitir que estos hechos queden impunes”, agregó.
Por su parte, el viceministro del Interior, Gabriel Rondón, anunció que el próximo martes se realizará una reunión de alto nivel en Bogotá para tomar decisiones frente al aumento de enfrentamientos entre hinchas en las carreteras del país, una situación que —según indicó— “ya se salió de control”.
El hecho revive el debate nacional sobre el rol de las barras bravas y la necesidad de una política integral de seguridad en el fútbol colombiano. Mientras tanto, los habitantes de Tolú aún intentan recuperarse del miedo vivido y del daño causado a su comercio local.